sábado, 2 de febrero de 2008

Oropesa

Allí estaban, todos reunidos en unas frías mazmorras sin dirigirse ninguna palabra, esperando a la hora señalada para marchar, el ansiado momento para volver después de tanto tiempo, esa humillante derrota había dejado una herida profunda, aún sin cicatrizar... Sus ojos inyectados en fuego y sus caras denotaban toda la furia y odio que habían acumulado.

Una de las puertas que rodeaban a la mazmorra se abrió súbitamente, una persona o lo que diablos fuese apareció tras ella, todos le miraban salvo uno que se dedicaba a jugar distraídamente con un cordel, mirando al resto con curiosidad. El que había entrado, custodiando la puerta, alzó la mirada para ver a sus compañeros, con un aire de preocupación, les dijo únicamente “Vamos”. El líder siempre se mostraba así, pensando en todo, que podría salir mal, analizando todos los movimientos, tanto los suyos propios como los que daría el enemigo. Había llevado a sus compañeros por el camino de la precaución y gracias a ello estaban vivos.

Los ciudadanos de la gran metrópolis caminaban, algunos sin rumbo fijo, contemplando los hermosos edificios que El Rey había alzado de la nada. Hace décadas se instaló en el reino derribando el antiguo sistema y desterrando a los gobernantes. Hizo muchas reformas, algunos dicen que demasiadas...un grupo de mercenarios patrullaba día y noche la ciudad, las libertades se redujeron drásticamente, muchos comercios tuvieron que cerrar ante las exigencias, los privilegios de los pocos adinerados que había desaparecieron como una gota de agua en el océano.

El Magnánimo había hecho el mundo a su medida, como siempre había querido. El pueblo cambió su modo de vida, los cultivos que mantenía cada ciudadano, con el que valoraban el esfuerzo diario, habían pasado a unas cómodas y aburridas mesas para reuniones inútiles. Todo empezaba a carecer de importancia...





Un rugido rompió la noche, un fogonazo de luz iluminó todo. Uno de los muros exteriores del castillo se había venido abajo, enormes trozos de piedra salieron despedidas destrozando todo lo que se encontraban en el camino, parecía que un gigante jugaba con ellas. Entre la confusión aparecieron del humo unas personas portando varas de fuego, gritando, podrían alcanzar el centenar. Una ola de pánico se extendió súbitamente, la gente corría en todas direcciones intentando formar grupos cerrados, con lágrimas en los ojos viendo a compañeros en el suelo huían...


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Hoy fue el temible examen de termo, empezada la parte de teoría/cuestiones Pineda se ausenta diciendo "Ahora vengo, voy a ver a Bauzá", se va,,,vuelve con un papel en la mano "Copien, les voy a decir las preguntas". Me ha fascinado XD, para qué elegirlas antes...

Sigo con mi atrincheramiento en la biblioteca de químicas, me encanta tener mucho espacio para mí y una luz que puedo encender cuando me de la gana. La comparo con la nuestra y qué cruz,,,a ver si un año de estos les da por empezar las obras.

De las fotos estas que he puesto hoy, poco que decir, la primera está sacada de internet, porque aún no he visto ninguna mazmorra o calabozo para fotografiar, las dos siguientes tan sacadas de la web de oropesa del mar, por lo menos pa que sepáis que existe xD y la última ya sí está hecha por mí, algo borrosa, pero no importa, así da más realismo a la historia!!

PD: Tengo que hacer la segunda parte!

2 comentarios:

Unknown dijo...

¡Eh, tío, me has copiado el nombre del blog! xD

Anónimo dijo...

felicidades ha sido magnifico tu historia me ha encantado
yani